Por una barra de pan

Dicen que las mejores ideas nacen cuando menos lo esperas, y eso me ocurrió a mi, ya que en una fría mañana de invierno la magia ocurrió.

Era jueves y por una razón que no recuerdo me quedé esperando a mi mujer y a mi hijo en la cafetería que tenemos en la esquina de casa. Yo había comprado el pan para comer ese día pero entre la espera y el olor al pan recién hecho con esa textura crocante que dice “cómeme, cómeme”; así que sin pensarlo dos veces me comí la punta del pan.

No sé si lo que atrajo a la gente fue mis ganas de comer pero casi al instante un mujer mayor se me acercó y me dijo “Recuerdo que yo hacía lo mismo con el pan cuando era pequeña, y éste nunca llegaba completo a casa” al tiempo que sonreía reviviendo ese instante. Y en eso, otro abuelo más se unió a la conversación ya acabó contando que en esta calle solía haber una sastrería donde iba con su padre y que en la esquina de esa calle se despidió de su hermano antes que se marchara exiliado hacia las Américas.

Fue en ese momento cuando casi sin quererlo me dí cuenta que en cada persona, que en cada muro, que en cada calle, nacen y conviven historias urbanas, historias reales que configuran una memoria colectiva formando el presente y construyendo el futuro.

Nuestras ciudades evolucionan frenéticamente, nuestra obsesión por controlarlo y medirlo todo muchas veces nos hacen como ciudadanos perdernos los pequeños detalles que conforman el tejido intrínseco de nuestros barrios. Obsesionados por estar siempre conectados parece que hemos desconectado con algo aún más importante: nuestras emociones.

Pintando -Historias es un movimiento que se vertebra y configura a partir de las emociones, la creatividad, los recuerdos y realidades individuales de sus habitantes que en conjunto crean una memoria colectiva que evoluciona y configura una nueva realidad de ver y entender nuestro entorno, nuestra ciudad, nuestro barrio. Que se sirve de la tecnología como un medio y no como un fin.

Nuestro objetivo es conectar generaciones a través de las historias contadas para conectar emocionalmente con la gente, con el juego como motor de la experiencia y con la tecnología como sustento, canal y medio.